Mortaja de un egipcio llamado Bes

En febrero de 2003 el Museu Egipci de Barcelona adquirió una obra muy singular. Por un lado, se trataba de un tipo de objeto de los que han llegado muy pocos ejemplares hasta nuestros días, y por el otro, su precario estado de conservación aconsejaba una rápida acción que permitiera garantizar su preservación y conseguir las condiciones que hicieran posible su exhibición pública. Afortunadamente, las tareas de restauración han hecho posible la recuperación y dignificación de una obra que prácticamente podía darse por perdida.